El análisis termogravimétrico TGA tiene una amplia gama de aplicaciones en muchos campos. A continuación se presentan algunas de las principales áreas de aplicación y ejemplos específicos:
Análisis de Polímeros: La TGA se utiliza para evaluar la estabilidad térmica, la temperatura de descomposición y los componentes volátiles de los polímeros para ayudar a seleccionar materiales poliméricos adecuados.
Compuestos: Se utilizan para estudiar el comportamiento térmico y las características de descomposición de materiales compuestos con el fin de optimizar el rendimiento del material.
Pruebas de Estabilidad de Medicamentos: El TGA se puede utilizar para evaluar la estabilidad térmica de los ingredientes farmacéuticos, analizar las características de descomposición de los medicamentos a diferentes temperaturas y asegurar la seguridad y eficacia de los medicamentos durante el almacenamiento y uso.
Análisis de Excipientes: Analizar los excipientes en formulaciones farmacéuticas para determinar sus propiedades térmicas e interacciones.
Tratamiento de Residuos: El TGA se utiliza para estudiar las características de descomposición térmica de los residuos, evaluar el cambio de masa y la liberación de energía durante su tratamiento térmico y ayudar a optimizar las estrategias de gestión de residuos.
Análisis de Suelos y Sedimentos: Analizar el contenido de materia orgánica y la estabilidad térmica en suelos y sedimentos para proporcionar soporte de datos para la vigilancia ambiental.
Análisis de la composición alimentaria: TGA se puede utilizar para analizar las propiedades térmicas del agua, grasa y otros componentes en los alimentos para ayudar a evaluar la calidad y estabilidad de estos.
Optimización de condiciones de almacenamiento: Al estudiar los cambios de calidad de los alimentos bajo diferentes condiciones de almacenamiento, se ayuda a mejorar la tecnología de almacenamiento y embalaje.